La verdad es que con ocuparme del tema de la “repicadera” que le ha caído a
Uribe últimamente lo único que hago es hacerle un favor, ya que el ex mandatario solo anda buscando cazar riña para aumentar su popularidad con la vociferación que le caracteriza ya que de acuerdo con los resultados de la más reciente encuesta de Gallup su popularidad es la más baja que haya tenido en los últimos 8 años; el 63% de los colombianos aún le apoyan.
Me ocupo de él porque no puedo comprender como el 63% de los Colombianos continúan en su secuestro mental de 8 años y a pesar de haberse liberados de su victimario deciden continuar secuestradas por el síndrome Uribe; como se puede pensar positivamente de una persona no ha hecho otra cosa que disfrazarse de cordero para hacerle daño al país a lo largo de su vida pública. ¿Por qué tiene o pretende Uribe seguir influyendo en los destinos de este país?, si ya él tuvo su cuarto de hora política y lo aprovechó más que bien para realizar todas sus fechorías llevándose consigo a miles de Colombianos que confiaron en él, por favor señor Uribe de el paso al costado y deje que el Presidente Santos haga su labor que bastante muestras le ha dado de como se hace realmente la política.
Esta semana armó un alboroto en torno al texto del proyecto de Ley de Victimas que hará su tránsito en el Congreso, hasta tal punto de convocar a la coalición Uribista para que no aprobasen el dicho texto, pero gracias a la sensatez y las recomendaciones de santos sus tesis fueron derrotadas, tesis que no se las cree solamente él y es lo que le ha vendido a los colombianos durante estos 8 años pasados mentiras y distractores, Colombia tiene más de 50 años de tener un conflicto armado interno, el único que no lo reconoce es Uribe por conveniencia. Se necesita estar enfermo de avidez de poder y dinero para adoptar posiciones como las que ha venido adoptando últimamente el señor Uribe, con el único objeto de tener influencias sobre entes administrativos y judiciales que le permitan mitigar los impactos negativos en la imagen que le vienen causando los escándalos atribuidos a su gabinete, amigos, hijos y parlamentarios de su colectividad que son evidentes y que el minimiza atacando a la justicia y periodistas.
Es que son demasiados los hechos que este señor ha cometido en contra del pueblo Colombiano; desde 1990 cuando era Senador fue artífice de la ley 50 derogando artículos del código sustantivo de trabajo en detrimento de la clase trabajadora y posteriormente defensor acérrimo de la ley 100 que ha enterrado la seguridad social de los Colombianos situación que tiene hoy a los colombianos destinados a morir por falta de atención médica con el único propósito de beneficiar a las EPS, hoy envueltas en el escándalo de corrupción más grande conocido en Colombia. Que no me venga a decir que el propósito era bueno y que se distorsionó como siempre sale a decir como el caso de AIS. Todo lo de él es premeditado y maquiavélico. Su mesianismo no lo deja vivir en paz, se considera el redentor y las controversias o adversidades se arreglan con vociferación, amenazas, violencia e intimidación, hoy tuvo un round más con el ex presidente Samper en la W, denotando su incapacidad para lograr el don de la tolerancia enfrascándose en un “rifi - rafe” de exigir respeto; por Dios de donde vienen esas palabras, de quien durante ocho años ha irrespetado al pueblo Colombiano con sus mentiras, falsos positivos, chuzadas, desfalcos, zonas francas y demás. “Ahora los pájaros le tiran a las escopetas decía mi abuela” .
Esto que expongo aquí es del conocimiento de todos, no existe nada nuevo, todos conocemos la cantidad de hechos que hacen ya que un 37% esté convencido de lo nocivo que resulta para el país que este señor siga interviniendo en la vida política Colombiana, Santos lo ha demostrado en los acercamientos con Venezuela y en su distanciamiento en otros temas demostrándole que la política se hace de otra forma.
Estoy preocupado además es porque llegan la elecciones para Alcalde y el señor Uribe anda desesperado buscando conseguir “alcaldías a tutiplén” para su movimiento político a como dé lugar, incluso hasta Peñaloza lo quiere adherir a su movimiento para la Alcaldía de Bogotá, así que imagínense ustedes que sería de Colombia llena de Alcaldes al mando de Uribe, con sus actitudes beligerantes y belicosas como decía Garzón ese país solo le cabe en la cabeza a Uribe “una sola Convivir”. Esa cifra del 63% de popularidad me demuestra que hay Colombianos no solo cautivos físicamente por fuerzas irregulares, sino que también hay un número mayor de Colombianos secuestrados mentalmente y como complemento están padeciendo el síndrome de Estocolmo, debido a ello es difícil llegar al el ostracismo.
